Equilibrio entre trabajo y estudios

 

Es claro que la etapa más complicada de este proceso será el inicio. Ese momento en el que debes acoplarte a nuevos horarios, nuevas cosas que hacer y menos tiempo de descanso. Es un hecho que con el estudio y el trabajo a la par, tu carga se aumentará, pues tendrás muchas más tareas por hacer. 

 

 

En este momento, lo primero que debes saber es que ninguna actividad es más importante que otra. Es decir, tanto el trabajo como el estudio son dos áreas importantes para tu crecimiento personal y profesional, sobre todo si te encuentras en los últimos años de tu carrera universitaria. Lo importante aquí es que sepas balancear la carga, pues, si no lo haces, esto te podría traer repercusiones en cualquiera de los dos ámbitos. Los expertos de Nicaragua dan ciertas recomendaciones a quienes están viviendo esta experiencia para que no corran el riesgo de descuidar ninguna de las dos actividades:

 

•Administra bien tu tiempo. Recuerda que ahora llevas dos cosas a la vez y tu tiempo se redujo. Debes planificar y organizar cada día tomando en cuenta todas tus tareas del trabajo y del estudio. Lo más importante de esto es que, realmente, cumplas ese horario y puedas salir adelante con todas las asignaciones. 

 

•No abandones ninguna de las dos actividades. En un determinado momento, es posible que llegues a sentir que el tiempo no te alcanza para cubrir las dos actividades. Cuando te sientas así, recuerda calmarte un momento y no tomar decisiones apresuradas. Para lograr el balance, se requiere de acoplación y, con el tiempo, sentirás normal estar saturado de actividades. Lo importante es que no abandones tus estudios, pues esos son tu pasaporte de entrada a mejores oportunidades en un futuro y que, de igual manera, no renuncies de tu trabajo, pues esa experiencia laboral abona mucho en tu curriculum. 

 

•Optimiza tu tiempo. En muchas oportunidades vas a tener tiempos muertos sin actividades planificadas. Tienes que saber utilizarlas y cubrir alguna tarea pendiente que tengas. 

 

•Descansa cuando puedas y duerme lo necesario. Dormir es una de las actividades más importantes, pues tu organismo necesita “recargar las baterías”. No lo dejes de lado, pues si no descansas lo suficiente, al siguiente día, no podrás rendir al 100% en el estudio y trabajo. 

 

•Aliméntate sanamente. La comida sana te brinda los nutrientes y vitaminas que tu cuerpo necesita para salir adelante. En momentos como este, es cuando más energías exige tu organismo y los alimentos son una excelente fuente de ello. 

 

Los expertos aseguran que cumplir estos sencillos tips  y que te tomes un tiempo para acoplarte te ayudarán a saber equilibrar el estudio y el trabajo. Después de cierto tiempo, todo se tornará más tranquilo y lograrás ese balance. Esto se verá reflejado en la reducción del cansancio, podrás rendir más tanto en el campo laboral, como en el estudiantil y, de igual manera, tendrás una mente más tranquila por la reducción del estrés.